Se abastecía de unos grandes depósitos que se dividían en V tolvas con capacidad de 60.000 metros cúbicos de mineral, sobre la cuales descargaban Las vagonetas del ferrocarril, debajo de Las tolvas existía un túnel donde se instaló una cinta metálica de 1.2 m de ancho y 136 m de longitud movida por motores eléctricos, una segunda cinta instalada sobre un puente móvil que podía avanzar o retroceder 16 m.
Con esto se conseguía facilitar Las maniobras de carga de los barcos a vapor, ya que bastaba con retraer la parte móvil del cargadero para que el barco pudiera presentar las distintas bodegas con solo avanzar o retroceder ligeramente.
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